A medida que envejecemos, la piel se vuelve más susceptible a lesiones y daños. ¿Pero por qué las personas mayores tienen un riesgo más alto de sufrir lesiones en la piel? Existen varios factores que contribuyen a esta vulnerabilidad y es importante entenderlos para poder prevenir y tratar adecuadamente estas afecciones.
Uno de los principales factores es el adelgazamiento de la piel. Con el paso del tiempo, la epidermis y la dermis se vuelven más delgadas, lo que reduce la protección natural de la piel contra lesiones. Además, la producción de colágeno y elastina disminuye, lo que resulta en una piel más frágil y menos elástica.
Otro factor es la disminución de la producción de sebo. Las glándulas sebáceas producen menos aceite, lo que conduce a una piel más seca y propensa a la irritación y descamación. La falta de humedad en la piel puede llevar a la formación de grietas y úlceras.
Además, la pérdida de grasa subcutánea y el deterioro de los vasos sanguíneos pueden afectar la capacidad de la piel para cicatrizar adecuadamente. Las lesiones cutáneas pueden tardar más en sanar y existe un mayor riesgo de infección.
La exposición solar acumulativa a lo largo de los años también contribuye al deterioro de la piel en las personas mayores. La radiación ultravioleta (UV) puede dañar el ADN de las células cutáneas, provocando arrugas, manchas y aumentando el riesgo de cáncer de piel.
Es importante destacar que los cuidados adecuados de la piel pueden ayudar a reducir el riesgo de lesiones. Algunas recomendaciones incluyen mantener la piel limpia e hidratada, utilizar protector solar diariamente, evitar la exposición excesiva al sol, usar ropa protectora y prestar atención a cualquier cambio o lesión en la piel para buscar atención médica de inmediato.
En resumen, el envejecimiento de la piel, la disminución de la producción de sebo, el adelgazamiento de la piel y la exposición acumulativa al sol son factores que contribuyen al mayor riesgo de lesiones en la piel en las personas mayores. Con un cuidado adecuado, es posible prevenir y tratar estas afecciones, promoviendo una piel saludable y protegida a cualquier edad.