Hace unos días, un complejo de entretenimiento de Disney se vio envuelto en una polémica después de que circulara una foto de uno de sus empleados vestido como «aprendiz de hada madrina» pero luciendo un bigote.
Aunque para algunos podría parecer un detalle trivial, esto encendió a la parte más conservadora de las redes sociales, quienes se indignaron por la apariencia del hombre y llamaron a boicotear al complejo.
Según el Daily Mail, la foto fue publicada por la usuaria de TikTok Kournti Farber, madre de tres hijos, quien documentaba su visita familiar y quiso rendir homenaje a los empleados que se esfuerzan para brindar una experiencia de calidad.
Fue entonces cuando todo estalló. Varios usuarios comenzaron a criticar a Disney por permitir que un hombre usara un disfraz de mujer y un bigote, considerando esto «inapropiado» debido a la presencia de niños que podrían «confundirse».
Aunque Disney ha adoptado posturas más progresistas y ha luchado contra la discriminación en sus nuevas producciones, esto no ha sido bien recibido por parte de su audiencia.
Incluso algunas celebridades del espectáculo y programas de televisión de Estados Unidos criticaron duramente al empleado. Una de ellas, la escritora conservadora Peachy Keenan, explicó que no se trataba solo de algo «inapropiado», sino que también «rompía la ilusión».
Otro caso fue el de Dave Rubin, presentador de televisión, quien incluso culpó al presidente Joe Biden de influir en la decisión de Disney de adoptar una postura más progresista. «Esto es un hombre con bigote usando un vestido. No es una persona ‘trans’. Piensen en cuántas chicas reales desean ese trabajo en Disney y se lo dieron a él por una razón», criticó.
Desde la empresa, explicaron que han tratado de ser más inclusivos incluso en los parques de atracciones. Además, señalaron que hay empleados que no se identifican como mujeres pero aún pueden formar parte del proceso de vestir y peinar a los niños sin necesidad de asumir un personaje femenino de Disney, según comunicado oficial.
Esta controversia ha puesto en evidencia las tensiones entre la búsqueda de inclusión y la preservación de las expectativas tradicionales en el mundo del entretenimiento. Mientras tanto, Disney enfrenta un desafío en la gestión de esta situación y en mantener un equilibrio entre sus diferentes audiencias y perspectivas.
