El expresidente Jiang Zemin, que sacó a China del aislamiento después de que el ejército aplastara las protestas prodemocracia de la Plaza de Tiananmen en 1989 y que respaldó las reformas económicas que dieron pie a décadas de crecimiento disparado, murió. Tenía 96 años.
Jiang murió de leucemia y fallo multiorgánico en Shanghái, donde había sido alcalde y secretario del Partido Comunista.
Jiang fue una elección inesperada para dirigir un dividido Partido Comunista tras los sucesos de 1989 y lideró cambios históricos.
Encarceló a activistas de derechos humanos, laborales y prodemocracia y prohibió el movimiento religioso de Falun Gong, al que el partido en el gobierno consideraba una amenaza para su monopolio en el poder.
Jiang renunció en 2004 a su último título oficial, pero seguía siendo una fuerza entre bambalinas.
Fuente: Agencia de Noticias