Monta un espacio de trabajo para ti
Es posible que, al tratarse de una situación temporal, hayas tirado trabajando donde podías. El problema es que trabajar en el sofá, o sentados a la mesa de la cocina no es la mejor solución a largo plazo.

Es importante, cuando teletrabajamos, mantener el trabajo y el descanso en diferentes espacios. De esta manera no se mezclarán ambos ambientes ni se difuminarán los límites.
Márcate unos horarios (y cúmplelos)
Teletrabajar pasa por estar muchas horas conectadas al ordenador y al teléfono. Una de las ventajas de estas herramientas es que las podemos consultar a cualquiera hora en cualquier momento.
Si vas a trabajar desde casa a largo plazo, márcate unos horarios – lo ideal sería mantener los que tuvieras en la oficina – y cúmplelos.
Vístete esta mañana y todas las demás
Los primeros días trabajando en casa podemos pasarlos disfrutando el hecho de trabajar en pijama. Pero, a largo plazo, trabajar en pijama puede acabar logrando que no nos lo quitemos de encima en toda la semana.

Invierte en material adecuado
Durante las primeras semanas de teletrabajo, hacerlo con el portátil viejo que teníamos en casa y una silla cualquiera podía parecer una buena idea. Dependiendo de la empresa y el sector en el que trabajemos, lo adecuado será que sea esta la que nos proporcione el material.

Aunque estés en casa, estás trabajando (las tareas del hogar para otro momento)
Si queremos ser productivos, tendremos que separar la vida laboral de la del hogar aunque trabajemos en casa. Por ello, ponernos un horario y trabajar en este horario sin distraernos con nada más, como lo haríamos en la oficina, es importante.
Fuente: https://www.trendencias.com